Pena, penita pena

Me da una pena enorme ver como en la blogosfera de las costureras han surgido problemas, no sé muy bien por qué... parece que se acusa a algunas de "divismo" y que las palabras de otras molestan a unas..... no sé si el problema está en las que escriben y dejan mostrar su vanidad o si el problema está en las que leen que se ven atacadas por la envidia y la amargura.
Yo entiendo que un blog es un espacio personal y en cierto modo es una prolongación de nuestra personalidad, si el que lo lee no está de acuerdo con lo expuesto, pues que no vuelva, dejas un comentario para constatar tu molestia y te vas pero ¡por favor¡ con educación y respeto, se puede discrepar sin faltar, hacerle ver al otro lo que piensas, que a lo mejor tiene parte de razón pero lo que no me gusta es que se siembre la cizaña.
Desde que empezé con esto, sólo he sacado cosas buenas, sinceramente, he aprendido muchas cosas que desconocía por completo, me he sentido tan agradecida por haber recibido tanto que me he sentido en la obligación de mostrar lo poquito que sé (y no es falsa modestia, es la verdad, aún sé muy poco) con la esperanza de que a alguien le sirva lo que yo aporto.
En cuanto a la vanidad..... ¡todos somos vanidosos¡ ¿a quién no le gusta que le alaben sus labores?, las que lo hacemos sabemos lo que cuesta hacerlas y el tiempo que lleva, por eso oir palabras de aliento nos gusta a todas, digo todas todas, sin excepción y si no hacer revisión de conciencia a ver si no es verdad.
Mi horizonte en este mundo se ha abierto un montón, he descubierto el placer de las cosas pequeñitas, la variedad de telas e hilos, los modelos antiguos, quaker, samplers, diseñadores muy variados y todo ha sido gracias a los blogs de la gente.
Gracias por estar ahí.